La avena es uno de los cereales más nutritivos y completos para la alimentación diaria. Tiene sus orígenes en Europa y Norteamérica, y es un alimento rico en vitaminas minerales, antioxidantes y fibra. Es por ello que se recomienda su consumo desde temprana edad.
Al igual que otros alimentos ricos en fibra y carbohidratos, la avena es un cereal muy completo y equilibrado. Además, aporta más grasa, proteínas y minerales que otro tipo de cereales.
¿Cómo preparar la avena?
En la gastronomía encontrarás muchas formas de preparación, ya sea en postres, galletas, panes, atoles o combinada con otros productos en forma de barra de cereales. Por eso, en el mercado la encontrarás en diferentes presentaciones, como son: molida, en hojuela o como crema de avena.
Propiedades de la avena.
La avena es un alimento nutricional que aporta al organismo gran cantidad de cobre, hierro, selenio, potasio, zinc, magnesio y calcio. Es rico en vitamina B1, B2, B3, C y E. Además, contiene ácido fólico, betaglucanos, fibras y antioxidantes especiales llamados “avenantramidas”.
Por eso, el consumo diario de este cereal aporta grandes beneficios para la salud del organismo.
Beneficios de la avena.
Es un potente antioxidante
Gracias a la avenantramidas, la avena es un poderoso antioxidante que ayuda a combatir la oxidación celular.
Además, se ha comprobado que su consumo ayuda a regular la presión arterial. Esto se debe a que dicha propiedad antioxidante contribuye con el aumento del óxido nítrico, un compuesto que favorece la dilatación del corriente sanguíneo.
Incrementa las bacterias buenas del intestino
Su alto contenido en fibras solubles (betaglucano) contribuye a su fermentación, permitiendo tener un efecto prebiótico en los intestinos. En otras palabras, ayuda con la alimentación y crecimiento de las bacterias beneficiosas del intestino.
Nivela el azúcar en la sangre
Es recomendada en pacientes diabéticos, ya que controla los niveles de azúcar en la sangre. Esto se debe a su alto contenido de betaglucanos.
Reduce el colesterol LDL
La avena también contribuye a reducir el colesterol malo (llamado LDL). Igualmente, su alto contenido de avenantramidas combate la oxidación del colesterol.
Se recomienda su consumo con otros alimentos ricos en vitamina C. La avena es un alimento esencial para prevenir enfermedades degenerativas del sistema cardiovascular.
Previene la aparición del asma
Es muy recomendada en la alimentación de los niños desde muy temprana edad, reduciendo así el riesgo de desarrollar enfermedades asmáticas de tipo persistentes.
Ideal en las Dietas para bajar de peso
Es muy utilizada en las dietas para mantener un peso ideal. Los betaglucanos en la avena contribuyen a equilibrar el azúcar en la sangre y producen una sensación de llenura, a la vez que combaten el estreñimiento.
La avena es ideal para perder peso, y más aún si se incluye en la dieta en combinación con frutas, vegetales y otros tipos de alimentos ricos en fibras y bajos en calorías.
Protege el sistema inmunológico
Por su alto contenido nutricional, la avena brinda energía y protección al sistema inmunológico de nuestro organismo. Es recomendable su consumo diario en el desayuno o en las meriendas.
Ayuda a prevenir enfermedades
La avena ayuda a prevenir enfermedades como el hipotiroidismo, gracias a su contenido de yodo, un mineral que ayuda al funcionamiento correcto de la glándula tiroidea. También se trata de un alimento que alivia la tos y la bronquitis, esto debido a sus propiedades expectorantes y mucolíticas.
Fortalece los huesos
El calcio contenido en la avena colabora en el fortalecimiento del sistema óseo del cuerpo, evitando la desmineralización. En otras palabras, ayuda a prevenir la osteoporosis.
Regenera los tejidos
Los aminoácidos esenciales de la avena son una inagotable fuente de proteínas, contribuyendo así en la regeneración de los tejidos.
Producto incluido en tratamientos de belleza
La avena no sólo es buena para tener una alimentación balanceada y gozar de sus beneficios para la salud, sino que también es reconocida en tratamientos de belleza y de cremas para el cuidado de la piel. Igualmente, es utilizada en mascarillas faciales acompañadas con miel, así como también en la elaboración de jabones y cremas limpiadoras.
Recuerda siempre consultar con tu médico antes de comenzar cualquier tratamiento con plantas medicinales.
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